Dubrovnik una ciudad preciosa de Croacia situada en la costa dálmata. El casco antiguo de la ciudad fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979. La ciudad es conocida como «la Perla del Adriático» y antiguamente su nombe oficial era Ragusa, su nombre en croata.
La parte antigua de Dubrovnik no tiene un puerto lo suficientemente grande y profundo como para que entren los barcos así que para llegar hay que ir en las lanchas del crucero, para añadirle un poco de diversión al asunto.
Ésta es la vista de las colinas desde el puerto viejo:
Catedral de la Asunción de Dubrovnik
Al entrar desde el puerto lo primero que se ve es este imponente edificio. Ésta es la catedral de la Asunción de Dubrovnik y fue construida entre 1673 y 1713. Aunque fue dañada por los bombardeos durante la guerra, la catedral ya ha sido reparada. En la fachada todavía se pueden apreciar muescas de la metralla, un recuerdo de la terrible guerra.
Monasterio dominico del siglo XIV
El monasterio dominico de Dubrovnik es uno de los mayores edificios góticos de la costa este del mar Adriático. Se construyó en parte como edificio religioso y en parte como parte del sistema defensivo de la ciudad, ya que sus muros forman parte de la muralla.
Después del terremoto que destruyó la ciudad en 1667, el monasterio y prácticamente todos los edificios de la ciudad tuvieron que ser reformados o reconstruidos. El terremoto causó la muerte de la mitad de la población del casco antiguo, provocando una época muy oscura en la historia de la ciudad.
Strandum, la calle principal de Dubrovnik
Después fuimos andando por la calle principal. La calle Stradum es una calle muy llamativa, el suelo es de mármol blanco y las paredes de los edificios también. Aquí está el palacio Sponza y su torre del reloj, que fueron construidos en 1520 y son una mezcla entre estilo gótico y el renacentista.
La isla de Lokrum
Para llegar a la isla de Lokrum se puede ir en lancha desde el antiguo puerto. Lokrum está a 10 minutos de Dubrovnik, un viaje muy corto.
La isla de Lokrum está llena de pinos y de pavo reales, éstos últimos fueron traídos por el archiduque Maximiliano a mediados del siglo XIX. En la isla también se puede visitar el palacio donde solía ir de vacaciones Sissi la Emperatriz. No hay playas de arena fina, pero el agua está tan buena y transparente que no importa.
¡Espero que os haya gustado Dubrovnik!
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